METÁFORAS PARA TIEMPOS DE CRISIS

Rendirse o resistir... ¿Hablamos de lo mismo?

Coloquialmente solemos usar muchas expresiones para tratar de ser más certeros a la hora de ilustrar estados de ánimo, como por ejemplo: "Bajar los brazos" (*) que es una expresión que usamos para referirnos a la actitud de rendirse o darse por vencido. 

Cuando reflexiono en este término, pareciera que rendirse a veces es algo negativo y otras veces es algo positivo. Como si la misma palabra encerrara dos significados distintos, casi antagónicos. Rendirse es bueno cuando uno lucha contra lo que es inevitable: el paso del tiempo, la muerte y la voluntad ajena cuando decide sobre si misma, por ejemplo. Entonces rendirse es aliviarse, es dejar esa resistencia inútil y desgastante que pone agrio el corazón. 

Pero definitivamente rendirse es malo cuando la lucha tiene que ver con ser uno mismo, con defender tus valores y tus ideales, con moldear un rasgo de carácter que te cuesta pero que deseás superar... Rendirse entonces es perderse, es abandonarse, es dejar que gane el tedio, la apatía, el desánimo, la acedia.

Pasa algo similar con la palabra resistir, que a veces tiene un significado positivo, sobre todo cuando alude a la perseverancia frente a alguna situación que nos interpela, que nos invita a sacar lo mejor de nosotros mismos, a poner todos nuestros recursos al servicio de una meta, de un propósito. Pero a veces resistir es desfavorable, principalmente cuando está ligado a la negación de la realidad y al autoboicot, cuando insistimos en lo que no tiene remedio, cuando nos hacemos daño forzando situaciones que nos desgastan...   

Lo mismo pasa con la expresión "Tirar la toalla"(*) que  también significaría rendirse. Y no sólo para el púgil dentro del cuadrilátero, claro. Metáforas que usamos para referirnos a la vida como si sólo se tratara de un combate de puños donde lo esperable es dar pelea. 

Sin embargo, en el campo espiritual rendirse es estar en tus cabales, mas fuerte que nunca. Es dejar de dudar y de tener miedo, para entregarse a algo infinitamente más grande. Es confiar en la sabiduría de los procesos de la vida, con una sonrisa, incluso a pesar de las lágrimas.  

Estuve a punto, tantas veces, de dejarme vencer, "contra las cuerdas" (*) Saben a lo que me refiero, claro que si. Seguramente también han estado en ese lugar alguna vez, pensando que no había soluciones o salidas para aquello que creyeron los superaría. Entonces les digo que con esa toalla sólo se sequen el sudor porque nada está librado al azar, y les juro que ya ganaron. 

Ganaron por puntos o por knock out (*) no importa. Pero definitivamente ganaron, cuando se dieron cuenta que sólo había que rendirse sin resistir para resistir sin rendirse, y les juro que no se trata simplemente de un juego de palabras.

Lic. Silvina L. Rodríguez

Psicóloga

Escucha Activa en Línea

11 2455 0296

(*) Expresiones entendidas en la acepción tradicional, todas relacionadas al mundo del Boxeo. 

(COPYRIGHT) Este aviso declara la propiedad intelectual de todo el contenido publicado en esta página web/blog, por lo tanto queda prohibida su copia, sin la debida autorización